Descubre en el blog de Aromatik Flor cuáles son las propiedades y cuidados de la Melisa. Apasiónate con sus beneficios.
Propiedades y cuidados de la Melisa
La planta de Melisa de nombre científico Melissa officinalis es una hierba perenne que pertenece a la familia de las lamiáceas. También es llamada toronjil u hoja de limón. Se originó en el sur de Europa y actualmente se ha naturalizado en las zonas templadas de Europa gracias a su cultivo.
Se caracteriza por el intenso aroma a limón que desprenden sus verdes hojas. Éstas son opuestas, pecioladas de margen dentado y superficie pilosa. Sus tallos son herbáceos y pueden llegar a medir hasta un metro de altura. El aroma de sus hojas proporciona efectos sedantes en el cuerpo. Es una planta que crece de manera silvestre en los prados de tendencia húmeda, en los campos de cultivo, bosques y en los terrenos con suelos que contienen un alto nivel de materia orgánica.
Su época de floración es en verano, donde aparecen las primeras flores pedunculadas con cáliz bilabiado en forma de tubo donde acumulan el néctar. Es una planta que no requiere de abundante luz solar pero necesita suelos arenosos con buen drenaje para potenciar su crecimiento.
Propiedades Sedantes
La Melisa contiene terpenos, citronella, citral, geraniol y otros componentes que le proporcionan un intenso aroma a limón que es muy usado en aromaterapia y ayuda a reducir el nerviosismo, el estrés y la ansiedad por su gran poder sedante.
Es una buena opción para calmar las palpitaciones de origen nervioso ya que ayuda a tranquilizar el músculo cardíaco y a restablecer el ritmo cardíaco.
Propiedades Medicinales
Esta planta tiene propiedades antioxidantes, ansiolíticas y antidepresivas que ayudan a mejorar el estado anímico de las personas, aportando más paz y bienestar al organismo.
También es utilizada como repelente de mosquitos gracias a su intenso aroma que ayuda a ahuyentar a los insectos.
La infusión de Melisa es muy conocida gracias a sus grandes propiedades digestivas que alivian las digestiones pesadas favoreciendo la asimilación de los alimentos. Para las personas que sufren de litiasis biliar es conveniente que tomen infusión de melisa ya que estimula la producción de la bilis y ayuda a prevenir la formación de cálculos biliares.
Sus propiedades relajantes ayudan a calmar los dolores estomacales y a mejorar problemas de salud combatiendo trastornos relacionados con el sistema nervioso, sistema digestivo, migrañas, control de la tensión arterial, dolores menstruales y disminución de dolores articulares y musculares.
Gracias a sus propiedades antisépticas y antivirales sirve como herramienta para bajar el calor corporal causado por infección. Su propiedad antiviral y expectorante lucha contra la gripe, o la congestión de las vías respiratorias. Es muy recomendable en caso de asma.
Su poder antiséptico es muy beneficioso para curar heridas y problemas cutáneos si se aplica por vía tópica.
Cuidados de la planta de Melisa
Luz
Es una planta que no requiere de sol directo ya que soporta bien las bajas temperaturas, de todos modos no tolera las heladas, si la ubicas en zonas de exterior donde es común las heladas, deberías exponerla en algún lugar donde reciba directamente la luz solar. Por lo general, puede vivir expuesta a pleno sol aunque prospera mejor en semisombra.
Suelo
La melisa crece en todo tipo de suelos de manera silvestre, en los prados de tendencia húmeda, en los campos de cultivo, bosques y en los terrenos con suelos que contienen materia orgánica, pero si se cultiva en maceta prefiere sustratos bien drenados.
Riego
El riego depende de la época del año en que se encuentre, ya que en verano es conveniente regarla con más constancia, aproximadamente unas 3 veces por semana mientras que en invierno con regarla una vez a la semana es suficiente.
Plagas y enfermedades
Enfermedades
En cuanto a las enfermedades destacan las enfermedades fúngicas llamadas fusarium y Oidio que absorbe las sustancias nutritivas de la planta y causa marchitez vascular. Las hojas inicialmente se vuelven amarillas en un lado de la planta y finalmente, se marchita toda la planta.
Plagas
Las plagas más conocidas de la Melisa son las babosas que se alimentan de la planta haciendo agujeros en sus hojas y tallos y comiéndose las hojas nuevas que van creciendo. Son uno de los principales enemigos de la Melisa. Las royas y las nematodos son otras de las plagas más comunes que puede sufrir nuestra planta y los síntomas más comunes que presenta son la aparición de manchas brillantes de color amarillo, marrón, naranja o rojo sobre hojas y tallos que generan grandes cavidades y exudaciones en tallos. Cuando la Roya ataca las hojas y tallos más graves acaban secándose y cayendo.