Descubre en el blog de AromatikFlor cuáles son las propiedades y cuidados del Ciclamen. Descubre su belleza.

La planta de Ciclamen también llamada Artanita o Ciclamen persicum pertenece a la familia primulaceae y es conocida como la flor del arte o flor del amor.
Existen distintas variedades de Ciclamen dependiendo de su tamaño, es una planta que destaca por sus preciosas flores de aroma dulce y largos tallos que se curvan con elegancia para devolver el fruto hacia el suelo. El color de las flores varía de tonalidad, desde el rosa, morado, blanco y rojizo y sus verdes hojas destacan por su forma de corazón.

Es una planta perenne tuberosa que en época estival deja de producir flor y durante el otoño crece rápidamente.
El Ciclamen es una planta que rechaza el calor y la exposición directa del sol y como toda planta de ciclo invernal, le gusta el frío. Puede estar en fase de floración durante todo el invierno.

Propiedades y cuidados del ciclamen

Propiedades del ciclamen

La planta de Ciclamen se usaba antiguamente para fines medicinales para tratar todo tipo de dolencias; dolores menstruales, enfermedades oculares, eliminar lombrices intestinales y mordeduras de serpiente, entre otras. Además se extraía su aceite esencial con fines aromáticos. Con el tiempo su uso medicinal ha ido quedando en entredicho por falta de evidencia científica que pudiese respaldar estos beneficios, de hecho se ha llegado a afirmar que puede provocar toxicidad a la persona, provocando efectos secundarios graves en caso de no usarse correctamente.

Cuidados del ciclamen

El ciclamen generalmente se cultiva en macetas en zonas de interior. Debido a las temperaturas cálidas permanece inactivo durante el verano pero con un correcto cuidado en Otoño vuelve a crecer.
Para estimular el rebrote durante su período de crecimiento, debes cortar los tallos de flores muertas que quedan en la base y durante su periodo de floración, debemos tener mucho cuidado de no ofrecer abundante agua ya que hará que el tubérculo se pudra, la planta se debe ir secando gradualmente durante 2-3 meses.

Luz

Durante el invierno, la época de crecimiento de la planta, el Ciclamen necesita luz de manera indirecta.
En verano, cuando la planta está inactiva, es mejor mantener el ciclamen en un lugar fresco y oscuro con buena circulación de aire.

Riego

En verano, mientras la planta está inactiva y perdiendo la mayor parte de sus hojas, se debe regar de manera moderada, simplemente para mantener la base húmeda .
Durante el invierno debemos incrementar la frecuencia de regadío ya que la planta se encuentra en época de crecimiento, evitando que le caiga agua directa a las hojas porque puede pudrirse.

Suelo

El ciclamen prefiere crecer en suelos orgánicos con un PH ligeramente ácido y ricos en buen drenaje.

Fertilizante

No es necesario fertilizar el ciclamen mientras está inactivo pero en la época de crecimiento, requiere cada dos semanas, un fertilizante líquido diluido en nitrógeno.

Temperatura y humedad

A las plantas de ciclamen no les gusta el calor extremo, las corrientes de aire o el aire seco. Crecen mejor en zonas con temperaturas entre 4 °C a 10 °C grados por la noche y entre 15 °C y 20 °C grados durante el día. La alta humedad, especialmente durante el invierno, es crucial. Para aumentar la humedad, debes mantener la planta en una bandeja llena de agua asegurándose de que la maceta no toque el agua (ya que esto puede causar la pudrición de la raíz).

Poda

Generalmente el Ciclamen no se poda, sólo se cortan las hojas basales que poco a poco se desecan para evitar que sea vehículo de enfermedades parasitarias.

Plagas y enfermedades

Las principales enfermedades de los ciclámenes son debidas a condiciones ambientales no favorables.

Tipos de enfermedades:

• Si a la planta empieza a caerse las hojas y las flores significa que la planta ha sido situada en un lugar demasiado cálido y seco. 

            Remedio: Regarla y desplazarla a un entorno más fresco y húmedo. 

• Si la planta empieza a presentar hojas amarillentas, es un síntoma de que la planta ha sido situada en un lugar demasiado cálido y oscuro

         Remedio: desplazarla a un entorno más fresco y húmedo. 

• Hojas con manchas amarillas extendidas y manchas necróticas sobre los pétalos y la parte central de la planta, es un síntoma de que la planta sufre una enfermedad fúngica. 

          Remedio: La planta se ha podrido a causa de la enfermedad, no hay nada que hacer.

• Hojas que aparecen con sutiles telarañas, salpicadas de manchas amarillentas y marrones mientras que las hojas se abarquillan con aspecto polvoriento y caen, es un síntoma de estar sufriendo el ataque de la araña roja, un ácaro muy molesto y dañino.

Remedio: Si la planta no es muy grande, se puede probar a limpiar las hojas para eliminar el parásito usando algodón mojado y jabón. Deberemos aumentar la frecuencia de las nebulizaciones y usar productos químicos específicos para este tipo de plaga.

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