Propiedades y cuidados de la Primula

Descubre en el blog de Aromatik Flor cuáles son las propiedades y cuidados de la prímula. Descubre su esencia.

La prímula también conocida como «matrimonio» es una planta de la familia de las primuláceas, cuya floración se centra entre los meses de invierno a primavera. Es una planta muy florífera que si se le ofrece unos cuidados básicos alegrará y decorará nuestra casa durante varios meses.

La Prímula cuenta con racimos de pequeñas flores de diferentes colores como el rojo, azul, blanco, amarillo, rosa o bicolor, que se elevan por encima de sus atractivas y arrugadas hojas que aunque está considerada una planta de exterior también podemos cultivarla en maceta en zonas de interior. Una vez que la planta haya terminado de florecer, puedes situarla en un lugar protegido del jardín.

Propiedades de la Primula

Medicinales

Los principales usos que podemos darle a la prímula son los medicinales. Entre sus componentes más comunes encontramos la Vitamina C, taninos, saponina, flavonoides, sales minerales, enzimas y ácido salicílico.

Su propiedad expectorante la hace una buena aliada para la patologías relacionadas con el sistema respiratorio como el asma, la bronquitis, fiebre y tos. Además gracias a su función calmante y antiespasmódica ayuda al sistema nervioso a relajarse calmando la ansiedad y el estrés.

Dirurética

Es un excelente diurético, ayudando a las personas que sufren de retención de líquidos a conseguir una mayor pérdida de peso.

Decorativa

La primula también es ideal para decorar espacios del hogar gracias a su diversidad de colores vivos, que potencian su belleza creando espacios únicos y bellos..

Cosmética

También podemos beneficiarnos de sus propiedades a través de la elaboración de cremas hidratantes y tonificantes que favorecen la piel.

Té y caramelo de Primula

Si dejamos secar sus flores podremos realizar un delicioso té de espectacular aroma, pero si además, a estas flores se les recubre con azúcar, tendremos unos exquisitos caramelos de primula.

Cuidados para la Primula

La prímula requieren la combinación adecuada de luz solar, agua y alimentos.

Estos consejos ayudarán a que la planta prospere en interiores:

Luz

La prímula crece mejor en temperaturas de moderadas a frescas; el calor intenso puede causar marchitez y fallas en las plantas. Se recomienda los alféizares bien iluminados, pero en interior no debe exponerse a la luz solar directa. Si la plantamos en zonas de exterior, se debe colocar en una esquina, preferiblemente sombreada o moteada. Durante las horas donde el sol eleva la temperatura, recomendamos dar un descanso a la planta y situarla en la sombra para evitar posibles quemaduras.

Riego

Necesita un pavimento bien drenado, de humedad adecuada, uniforme y regular para prosperar. No deben estar empapados, pero tampoco dejes que la tierra se seque.

Fertilizante

Debido a que no están destinadas a ser plantas de interior de larga duración, una sola aplicación de fertilizante líquido de liberación controlada puede ser adecuada para superar la temporada de floración.

Propagación

En caso de querer plantar tu propia planta en una maceta, coloca las semillas directamente en la maceta en otoño o principios del invierno y manténla bajo luces fluorescentes en un lugar cálido, con agua corriente. Las plantas deberían estar floreciendo a principios de la primavera.

Plagas

La Prímula es una planta que no suele sufrir de enfermedades ni de ataques de plagas, no obstante las plagas más comunes son las originadas por la mosca blanca, que se alimenta de la savia de la planta al igual que los pulgones. Los gasterópodos como las babosas y caracoles junto al gusano minador de las hojas van devorando la planta desde la raíz hasta acabar con ésta. Otra plaga común es la arañuela, que teje una telaraña por la parte interior de las hojas mientras la va pudriendo y el gusano blanco va devorando la planta desde la raíz.

Entre la enfermedades más comunes podremos encontrar las que se muestran a continuación:

Enfermedades que se originan en la hoja

Enfermedades fúngicas: Cuando los hongos o bacterias aparecen, es importante regar la planta de manera moderada, evitando el estancamiento de agua y alejarla de las demás plantas para evitar que la enfermedad se propague.
Para saber si tu planta tiene una enfermedad de este tipo basta con mirar sus hojas, si éstas presentan manchas amarronadas sobre sus hojas, es que padece de este tipo de bacteria.

Como enfermedades fúngicas más comunes están La Roya; el hongo afecta la hoja formando bultos de color amarillento. Otra plaga conocida es el Moho gris, es la más común de todas, se observa con la presencia de una pelusa grisácea sobre el follaje indicándonos que la planta tiene demasiada humedad. Cuando el moho se origina en la parte superior de las hojas es porque la planta ha sido afectada por la bacteria Physarum Gyrosum y nos indica que le falta luz, aire y tiene demasiada humedad.

Enfermedades que se originan en la raíz

Si exponemos la planta a excesiva humedad, a riegos abundantes y altas temperaturas produciremos la enfermedad de Erwinia, que comienza pudriendo el cuello de la planta hasta que provoca el fin de ésta. También existe la enfermedad Phytophthora que va marchitando sus hojas y pudriendo la raíz, provocando la muerte de la Prímula.