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Planta de ciclamen mini
Planta de ciclamen mini – 11 cm
3,00€ IVA incluido
La planta de ciclamen mini es ideal para la época de otoño e invierno por su resistencia a los días nublados y fríos. Por su gran variedad de colores, es una planta que alegrará cada rincón de tu estancia.
Todas nuestras plantas son de cultivo propio.
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La planta de ciclamen mini es una de las plantas más reconocidas por su belleza y sus espectaculares flores que resaltan sobre el verde oscuro de sus hojas. También llamada Artanita o Ciclamen persicum pertenece a la familia primulaceae y es conocida como la flor del arte o flor del amor.
Existen distintas variedades de Ciclamen dependiendo de su tamaño, es una planta que destaca por sus preciosas flores de aroma dulce y largos tallos que se curvan con elegancia para devolver el fruto hacia el suelo. El color de las flores varía de tonalidad, desde el rosa, morado, blanco y rojizo y sus verdes hojas destacan por su forma de corazón.
Es una planta perenne tuberosa que en época estival deja de producir flor y durante el otoño crece rápidamente.
El Ciclamen es una planta que rechaza el calor y la exposición directa del sol y como toda planta de ciclo invernal, le gusta el frío. Puede estar en fase de floración durante todo el invierno.
¿Quieres saber todas las propiedades y cuidados de la planta de ciclamen mini?
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Propiedades y usos
Propiedades y usos
La planta de ciclamen mini es una variedad perfecta para la temporada de otoño e invierno, por su resistencia a los días nublados y fríos de estas épocas. Ideal para cualquier zona de exterior que no tenga mucho sol, y también perfecto para poner en el interior cerca de una ventana. Es una variedad que proviene del oriente..
Cantidad de luz
Es una planta de exterior, pero rechaza la exposición directa del sol. Si la ubicas en zonas de interior, procura dejarlas al lado de una ventana para que le llegue la luz solar a través del cristal.
Siempre hay que retirar todas las flores y hojas viejas, para poder darle más fuerza al resto de la planta, y así tener una planta brillante.
Riego
Riega la planta cada dos días asegurándote de no inundarlas.
Si ves que la hoja está blanda y cae, normalmente es que necesita más agua.
Cuando la riegues, no lo hagas por las hojas y flores, porque se puede quemar.
Tienes que echar el agua en la tierra de la maceta, para que hidratemos la raíz.
Un truquito casero que os recomendamos, es tocar la tierra con el dedo para comprobar si está húmeda o no, si no lo está, riégala.
Nunca dejes debajo de la maceta un plato con agua por mucho tiempo, porque puede provocar la aparición de enfermedades u hongos y ocasionar daños irreparables.
Si la quieres trasplantar a un jardín o maceta más grande, échale más agua de lo habitual la primera semana.
Otros cuidados
Puedes intentar hablar con ellas, quién sabe, puede que funcione.
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